Cuando un bebé nace, los padres celebran cada movimiento y gesto, pero quizás, el correcto control de la cabeza en ocasiones pasa inadvertido. No es del dominio público que los bebés que no levantan la cabeza o no se empujan con sus brazos a los tres meses de nacidos, pueden estar en riesgo de tener un retraso en el desarrollo motor. Diversas publicaciones han demostrado que el 45% de los niños con retraso en el desarrollo, nunca son diagnosticados y otro porcentaje no tiene un diagnóstico acertado. También se ha descrito que sólo la mitad de los niños con problemas en el desarrollo motor, logran ser diagnosticados antes de iniciar su vida escolar.

 

¿Qué es el retraso del desarrollo motor o retraso del desarrollo físico?

 

Es el retraso en la adquisición de habilidades esperadas a una edad determinada como levantar la cabeza, rodarse, gatear, manipular objetos, caminar o hablar. El desarrollo motor, es la secuencia en la adquisición de habilidades en forma y tiempo determinado. Esta secuencia refleja la maduración funcional desde la cabeza hasta los pies. Al mismo tiempo, este proceso normal y coordinado promueve el desarrollo cognitivo y perceptual, por esto, cuando se ve alterado el desarrollo motor, también hay alteración cognitiva, de lenguaje y en el comportamiento social.

Es una condición muy común, la cual puede ser señal de un desfase moderado o de una condición más compleja. Afecta el rendimiento escolar y al mismo tiempo ocasionar problemas sociales y emocionales. El retraso puede incluir, retraso en el desarrollo motor, desarrollo cognitivo, desarrollo de lenguaje y/o socioemocional.

 

 

Imagen 1. Retrasos del desarrollo.

 

Los bebés o niños con retraso en el desarrollo motor deben ser intervenidos con rehabilitación física, del lenguaje y/o atención psicológica en el momento que son diagnosticados. En casos particulares como los niños prematuros, la intervención temprana favorece e iguala en habilidades a los niños (as) que llegaron a término. Si la detección se hace mucho tiempo después, las oportunidades de intervención se pierden.  

 

Mi hijo(a) no realiza las mismas actividades que sus compañeros (as).

 

Algunos niños pueden lograr habilidades a más temprana edad y otros lograrlas al poco tiempo. Recuerda que no todos los niños están listos para realizar las mismas actividades en los meses que corresponde a su edad, sin embargo, es importante que consultes a expertos sobre lo que observas. Cuando asistas a la consulta regular con el pediatra, no olvides describir lo que te preocupa. Si hay un retraso en el desarrollo, los canalizarán con un fisioterapeuta con especialidad en Neurodesarrollo, terapeuta del lenguaje y/o psicólogo.

 

Algunas observaciones que deben alertar a los padres y pediatras:

 

  • No controla ni levanta la cabeza.
  • Tiene dificultad para deglutir la comida.
  • Espasmos (contracción muscular involuntaria).
  • Tiene una postura poco estable y asimétrica.
  • Cuando mi hijo(a) se mueve, parece muy débil.
  • Cuando mi hijo(a) se mueve, lo hace muy tenso o rígido.
  • Mi hijo(a) no está creciendo de la forma en la que debería.
  • No habla con tanta facilidad como los niños (as) de su edad.
  • Al jugar con otros niños, no parece realizar las mismas actividades.

 

Otros aspectos relevantes son:

 

  • Desbalance en sus emociones.
  • La velocidad a la que aprende es mucho más lenta.
  • Comunicación poco apropiada cuando lo comparan con niños de su edad.
  • No parece normal la manera en la que convive con familiares, niños o personas que lo rodean.

 

NOTA: si tu hijo es prematuro, contacta a un Fisioterapeuta con especialidad en Neurodesarrollo. No temas, los bebés prematuros pueden alcanzar las habilidades esperadas y tener un desarrollo normal. 

 

¿Cuán tiempo debo esperar para informar sobre las observaciones que tengo sobre mi hijo (a)?

 

El tiempo que les tome programar una consulta y asistir con su pediatra y/o su fisioterapeuta. Si tu hijo no está realizando ciertas actividades, puede ser parte de su desarrollo y pronto lo logrará. Si el retraso se debe a un problema menor o algo grave, siempre habrá un beneficio si se recibe un tratamiento lo más pronto posible. Los expertos en la salud recomiendan a mamá, papá y a quienes cuidan de los bebés y niños, confiar en sus observaciones, no desecharlas y buscar una respuesta a sus inquietudes.

 

¿Quiénes detectan el retraso en el desarrollo motor temprano?

 

La Academia Americana de Pediatría (AAP por sus siglas en inglés) recomienda que sea en todos los niveles de prevención, que incluye a pediatras, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, terapeutas del lenguaje, psicólogos, enfermeras y cuidadores, a realizar evaluaciones cada 3, 6, 9, 18 y 30 (o 24) meses. El propósito es detectar algún retraso en el desarrollo del movimiento, del lenguaje y/o del comportamiento social.   

 

Las habilidades que los niños logran y el tiempo en el que las realizan, tienen un orden. La vigilancia del desarrollo en los niños (as) es un proceso flexible, longitudinal, continuo y acumulativo en el que los pediatras y fisioterapeutas logran identificar si existe una alteración o no en el desarrollo. Evaluar a los niños y contar con un registro, permite tratar al paciente e informar a la familia del diagnóstico, pronóstico y cuidados del paciente si así lo requiere. 

 

Médico general, pediatra o neonatólogo.

 

Todas las personas que intervienen en la salud y cuidado de los bebés tienen una participación clave para el reporte de cualquier novedad. En ocasiones, el retraso en el desarrollo de bebés y niños pasa inadvertido. Las razones más frecuentes son: falta de tiempo, personal poco capacitado, clínicas competitivas, costo elevado y falta de consenso en las pruebas más adecuadas para determinada población. Otra explicación se debe a que sólo en 23% de los médicos describen tener herramientas de diagnóstico estandarizadas para la evaluación del correcto desarrollo de los niños (as). Por esto, es recomendable la relación de un equipo integral que incluya al médico, fisioterapeuta, terapeuta ocupacional, terapeuta del lenguaje y psicólogo (imagen 2) para vigilar el desarrollo de bebés y niños. 

 

                                              

Imagen 2. Equipo multidisciplinario para la atención del retraso en el desarrollo.

 

Existen diversas pruebas diseñadas para evaluar: 1. desarrollo motor grueso, 2. desarrollo motor fino 3. de lenguaje y 4. desarrollo social. La evaluación debe ser dinámica, constante y realizarla en repetidas ocasiones valorando en cada visita las habilidades acordes a la edad. 

 

Fisioterapeutas y terapeutas ocupacionales

 

Harán preguntas puntuales y escucharán lo que más preocupa a mamá y a papá o a quien esté a cargo del cuidado del paciente. Evaluarán la postura de tu hijo, la manera de jugar, caminar e interactuar con el ambiente. Lo ideal es hacerlo cuando el niño (a) esté tranquilo para evitar sesgos en el diagnóstico. Llevar al niño con hambre o somnoliento, evita hacer una correcta valoración. 

 

Tanto en la consulta con el pediatra como con su Fisioterapeuta, se recomiendan cuestionarios escrito y no orales. Las pruebas de evaluación del desarrollo tienen una sensibilidad (43-90%) y especificidad (56-91%) baja lo que ocasiona que niños con retraso en el desarrollo no sean correctamente evaluados y niños sin problemas en el desarrollo sean mal diagnosticados. Por lo que se recomienda:

 

  • Hacer un juicio clínico integral.
  • Realizar evaluaciones a diferentes edades. 
  • Evaluar la calidad y simetría del movimiento. 
  • Considerar evaluar una gran variedad de habilidades, no concentrarse en un solo grupo.
  • Aplicar valoraciones estandarizadas para determinar el control y desarrollo motor.

 

El objetivo del Fisioterapeuta es interactuar con el paciente y la familia con énfasis en el movimiento y actividades que dirijan el aprendizaje normal del movimiento y cambios neuroplásticos, promover su salud y disminuir la discapacidad funcional. También diagnosticar y planear un tratamiento de acuerdo con las habilidades que corresponden a la edad del bebé o del niño. Estos objetivos lo logran a través de un plan individualizado. 

 

Papás

 

Los papás son los que generalmente detectan los primeros signos cuando hay un retraso en el desarrollo. Cualquier inquietud debe ser atendida por los especialistas en la salud. La información que proveen los papás ayuda a recabar datos y tener presente antecedentes familiares, factores de riesgo o complicaciones en el desarrollo del niño.

 

Médicos, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales y del lenguaje y psicólogos realizan cuestionarios contestados por los papás. La ventaja de esta prueba es que incluye la participación de los padres en la evaluación del niño. Son fáciles de usar, resuelven el problema del tiempo y obtienen información valiosa. Esto favorece la participación de los papás en la salud de los niños y facilita la relación entre el médico o Fisioterapeuta y los papás.

 

¿Qué es la Detección Temprana del Desarrollo Motor (DTDM)?

 

La detección temprana, es el conjunto de pruebas estandarizadas para determinar si existe o no retraso en el desarrollo de bebés y niños. La detección temprana de alteraciones en el desarrollo se determina en las evaluaciones de bebés a los 3, 6, 9, 18, 24 y 30 meses. 

 

Objetivos: 

 

  • Prevenir el deterioro funcional.
  • Mejorar las capacidades físicas. 
  • Minimizar los retrasos en el desarrollo.
  • Inhibir el establecimiento de una secuela.
  • Promover la salud y bienestar del paciente.
  • Atender las discapacidades existentes o futuras.
  •  

La detección temprana sigue un orden: evaluación, diagnóstico y tratamiento. Las valoraciones siempre deben incluir historia clínica, examen neurológico y evaluación neuromotriz con pruebas e instrumentos estandarizados. El diagnóstico inicial puede hacerlo el pediatra, la valoración detallada del desarrollo, lo realiza en conjunto con un grupo multidisciplinario de fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, terapeutas del lenguaje, oftalmólogos y/o psicólogos. El objetivo, es realizar una valoración precisa del desarrollo, considerando las fortalezas y debilidades del niño, factores de riesgo y un plan de tratamiento e intervención de acuerdo con las necesidades del paciente para lograr el mejor resultado.   

 

Para la correcta detección, es necesario conocer los signos del desarrollo típico y atípico por medio de la observación y evaluación del paciente. Lo ideal es lograrlo durante el primer año de vida, ya que puede determinarse si hay una alteración leve o discapacidades específicas, como parálisis cerebral o algún espectro de autismo, entre otros.

 

El desarrollo de las sinapsis (comunicación entre las neuronas) para las habilidades motoras, la vista y la audición, alcanza su punto máximo a los 3 meses de edad, por lo que, tan pronto se sospeche de algo, el niño debe ser referido a una evaluación. Los padres no deben “esperar y ver” ya que se puede detener el progreso del desarrollo del infante.  La detección temprana es importante y su hallazgo no representa una señal de alarma; la mayoría de los casos no son serios y con la intervención adecuada se pueden superar. 

 

Importancia de la rehabilitación con fisioterapia y retraso en el desarrollo motor.

 

La intervención temprana en el retraso del desarrollo motor logra mejorar un gran número de problemas. Numerosos estudios demuestran la importancia de la detección e intervención temprana con fisioterapia. La base de la rehabilitación con fisioterapia es promover el aprendizaje de movimientos normales, ejercicios en contra de la gravedad y reducir la discapacidad funcional. Por ejemplo, cuando los bebés no levantan la cabeza, ejercicios preventivos como colocar al infante más tiempo sobre su vientre, le facilitará experimentar con la gravedad, le ayudará a desarrollar los músculos del cuello y la espalda y evitará problemas como plagiocefalia (deformidad craneal) o torticolis postural. 

 

El apoyo de la familia ayuda a colaborar con los fisioterapeutas y a compartir responsabilidades en la toma de decisiones. Es de suma importancia informar y educar al paciente, a la familia y a quienes estarán a cargo del cuidado del bebé o del niño (a).

 

¿Porqué cada vez hay más casos de niños con trastornos del desarrollo motor?

 

En los últimos 25 años, los retrasos en el desarrollo han ido en aumento porque con mayor frecuencia hay más de un bebé en los partos, más niños prematuros y así como el aumento en la sobrevida de niños con trastornos cardíacos, neurológicos y genéticos. 

 

¿Quiénes por su condición de salud pueden tener retraso en el desarrollo motor?

 

El retraso motor se ha asociado a ciertas condiciones de salud como parálisis cerebral, enfermedades del corazón (cardiopatías), Síndrome de Down, que afectan el desarrollo en la infancia y se deben abordar con atención temprana y en centros especializados de fisioterapia, de lo contrario se puede llegar a un deterioro postural y al retraso en la adquisición de habilidades motoras gruesas, que son causa común de discapacidad en niños en todo el mundo. La rehabilitación favorece el desarrollo de los niños y potencia las habilidades para poder ser niños más independientes.

 

 

El desarrollo es un proceso complejo y dinámico. Tiene etapas de crecimiento, estancamientos y regresiones en el tiempo. Los especialistas de la salud tienen un papel importante en la detección temprana del retraso en el desarrollo. Cuando hay retraso en el desarrollo motor, es importante atender con una fisioterapia, terapia del lenguaje y/o atención psicológica. 

Los fisioterapeutas de RIE tenemos 35 años de experiencia, contamos con un programa para la detección e intervención temprana del desarrollo motor. Estamos certificados en el “Manejo & Tratamiento en Niños con Parálisis Cerebral y Otros Desórdenes Neuromotores” por la NDTA por sus siglas en inglés (Neuro-Developmental Treatment Association) y la EBTA (European Bobath Tutors Association).

 

¡Te esperamos!

 

REFERENCIAS

  • Council on children with disabilities; Section on developmental behavioral pediatrics; Brightfitures steering committee; medical home initiatives for children with special needs Project advisory committee. 2006. Identifying infants and Young children with developmental disorders in the medical home: an algorithm for developmental surveillance and screening. Pediatrics. 118(1): 405-420.
  • Gorgon EJR. 2018. Caregiver-provided physical therapy home programs for children with motor delay: A scoping review. Phys Ther. 98(6), 480-493. 
  • Harris S. R. (2016). Early identification of motor delay: Family-centred screening tool. Canadian family physician Medecin de famille canadien, 62(8), 629–632. 
  • Mackrides PS & Ryherd SJ. 2011. Screening for developmental delay. Am Fam Physician. 84(5): 544- 549.
  • Noritz GH & Murphy NA. 2013. Motor delays: early identification and evaluation. Pediatrics. 140 (3): 2016-2027.
  • Cornill H Blauw-Hospers & Minja Hadders-Algra. 2007. A systematic review of the effects of early intervention on motor development. Dev Med Child Neurol. 47(6): 421–432.
  • Oberklaid F & Efron D. 2005. Development delay. Identification and management. Aust Fam Physician. 34(9): 739- 742.